Un espacio de reflexión sobre la pérdida a través de los cuentos
María, de Librería Nemo, nos acompañó la tarde del 12 de noviembre para leer y reflexionar sobre dos cuentos que son complementarios: Soy la vida y Soy la muerte, de la editorial Bárbara Fiore. Una de las asistentes, nuestra amiga Mª Ángeles, nos contaba que la autora, Elisabeth Helland Larsen, trabaja como payasa para niños en hospitales infantiles y campos de refugiados. Los textos son directos, potentes y poéticos al mismo tiempo, y las ilustraciones cargadas de sensibilidad, de hecho, llamó nuestra atención la forma amable en la que se representa el personaje de la muerte, muy diferente a cómo estamos acostumbrados. De forma unánime a todos nos gustó más Soy la muerte. Los asistentes fueron muy participativos, contaron vivencias personales y anécdotas graciosas, alguna que las cuales podríamos haber titulado “este muerto está muy vivo”, y también se habló sobre cómo se llevaba el luto en algunas familias en otras épocas. Especialmente interesante nos resultó la costumbre de un pueblo originario que nos llamó la atención por su forma, tan diferente a la nuestra, de entender la muerte de un ser querido; cuando alguien muere en su tribu, no lo entierran, sino que lo dejan en la naturaleza para que los animales se lo coman, ya que es una forma de que pase a formar parte de todo lo que les rodea.
Todos estuvieron de acuerdo en la necesidad de ‘‘aprender sobre la muerte’’ desde edades muy tempranas, ya que incluso los adultos tenemos miedo y pocas herramientas de afrontamiento en estas situaciones, incluso algunos médicos de la sala hicieron visible la dificultad que ellos mismos tenían a la hora de comunicar el estado del paciente a los familiares.
Con cada sesión se crea un ambiente diferente, surgen temas muy variados, compartimos y aprendemos. ¡Estamos deseando que llegue la próxima!
Próxima sesión:
Cuento: La mujer esqueleto.
Invitada: Mercedes Aguilar, psicóloga.
Fecha: Lunes, 10 de diciembre.
Hora: 18:30 h.
